Ahora que Iker Larrañaga se esfuerza por recuperarse completamente de su lesión, es buen momento para saber lo que opina sobre distintos aspectos del Mundial:
«En primer lugar, yo diría que el actual calendario tiene demasiadas carreras. Están hablando de reducir el número y dejarlo en dieciocho, pero creo que incluso bajar a quince resultaría más acertado. Así además se eliminarían esos Grandes Premios que se celebran en países poco desarrollados y donde, como pude comprobar el pasado año cuando me lesioné en Indonesia, los servicios médicos no siempre están a la altura.
Por otro lado, entre la cantidad de carreras que componen el certamen y lo exigentes que resultan, hay que hilar muy fino para completar una temporada completa sin percances. Cada fin de semana de un Gran Premio salimos siete veces a pista y los equipos nos exigen dar el máximo siempre que lo hacemos, con lo cual al final hay muchos momentos en los que acabas yendo por encima del límite.
El nivel además es altísimo, hay muchísima igualdad, y el adelantar resulta complicado, razón por la cual la salida tiene una importancia de alrededor de un cincuenta por ciento en el resultado final que puedas obtener en una manga. En el Campeonato de España yo salgo bien sin problema, pero en el Mundial hay motos rapidísimas, algunas de ellas, con ayudas electrónicas que mejoran su capacidad de tracción y aceleración, y claro, si sales delante y coges el ritmo de los primeros, la propia carrera te lleva. Desde luego tengo claro que el de las salidas es un apartado en el que debo trabajar a fondo, intentando mejorar mi velocidad de reacción, etc.».
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