Hablamos hoy con Oriol Oliver, quien en estos días aborda su trabajo de pretemporada con vistas a la próxima campaña, en la que ya le tendremos militando en MX2 a lomos de una «dos y medio» cuatro tiempos.

 

− 2019 ya es historia. ¿Cuáles consideras que han sido tus mejores momentos del año?

− «Sin duda, mis mejores momentos los viví durante la primera mitad de la temporada. Antes de mi lesión, empecé el Campeonato de España muy muy fuerte, ganando las dos mangas de Talavera con cierta ventaja y prosiguiendo en lo más alto hasta que en Bellpuig me lesioné. También arranqué el Europeo con buen pie, firmando siempre excelentes registros en los entrenamientos, aunque luego en carrera sufrí muchos contratiempos. Después de la lesión no sé muy bien si perdí la confianza o qué, pero ya no me salieron las cosas igual. Y el peor recuerdo del año es desde luego el de la propia lesión. Cuando me caí pensé que no me había hecho nada y mira: radio, cúbito, y escafoides. Por suerte, la operación fue muy bien y en solo dos semanas volví a subirme a la moto».

− ¿Cómo ha resultado tu paso de la 125 a la «dos y medio» 4T?

− «Pues la verdad es que me acostumbré muy rápido a ella. Llevo ya tres meses entrenando con la Kawa de mi hermano y me siento muy a gusto. La forma que tiene de entregar la potencia me ha permitido mejorar mucho el paso por curva, sobre todo, en terreno mojado, pero está claro que tengo que trabajar más mi físico, porque la moto resulta más exigente que la 125. Lo que no creo que haya variado mucho es mi forma de pilotar».

− ¿Y vas a seguir con Kawasaki?

− «No, no. Aunque por el momento no puedo revelar el nombre del equipo con el cual correré, lo que sí es seguro es que tendré a mi disposición una KTM. Ya la he podido probar y hay una diferencia considerable con respecto a la Kawa en cuanto a motor: la moto austríaca, aunque no destaca precisamente por sus bajos, ofrece una respuesta brutal a medio régimen. Por el contrario, el chasis de la Kawa me parece más manejable».

− Correr por Europa significa enfrentarse de cuando en cuando a circuitos de arena. ¿Qué tal se te dan?

− «Bueno, donde yo vivo no hay cerca un solo circuito de arena. Todo lo más que puedo hacer es desplazarme hasta Red Sand, así que cuando toca una carrera del Europeo en un trazado como el de Valkenswaard, la cosa se complica bastante: este año, como era verano y no había colegio, pudimos irnos tres semanas antes a entrenar a Holanda, compartiendo pista con gente que va muy deprisa en arena y de la que sin duda aprendes mucho».

− Y ya que hablas de aprender de otros pilotos, ¿has tenido o tienes algún ídolo en particular?

− «Ryan Dungey siempre me ha gustado mucho. Y ahora que voy a llevar una KTM, a lo mejor cambio mi hasta ahora habitual 312 por el número 5 ó el 51, justamente en honor a Dungey. También admiraba mucho el pilotaje de James Stewart, como actualmente admiro el de Jorge Prado».

− ¿Qué ritmo de entrenamiento estás llevando ahora mismo?

− «Monto miércoles y jueves y fines de semana. Tengo como entrenador a Xevi Colomer y con él los miércoles trabajamos la técnica de pilotaje, para los jueves realizar sesiones cronometradas de bastante intensidad. Xevi también me manda por así decirlo unos deberes que son lo que yo tengo que hacer ya durante los fines de semana. A veces viajamos a Francia, porque allí hay buenas pistas con el terreno muy cuidado, que facilitan un buen entrenamiento».

− Y cuando te cansas de tanta moto…

− «Pues me gusta, por ejemplo, hacer saltos con la bici y luego practico un poco de footing, natación, etc.».

− ¿En qué deberías mejorar más de cara al año próximo?

− «Hombre, quizás mis puntos fuertes como piloto sean en este momento la propia técnica y la finura de estilo, la precisión, pero me falta poder aguantar mejor el esfuerzo de las mangas, así que hay que trabajar a fondo el físico».

− Mucho de lo que sabes lo has aprendido de la mano de tu hermano, ¿no es así?

− «Sí y de hecho entrenamos juntos siempre que podemos. Él es mayor que yo, tiene 21 años, pero este año coincidiremos en el Nacional de MX2. Eso sí, ninguno de los dos hemos probado nunca otra especialidad fuera del cross».

− ¿Qué tal te defiendes con la mecánica?

− «Bueno, para ser sincero, en mi moto solo me ocupo de las tareas de mantenimiento más básicas: limpiar filtro, revisar el apriete de tornillos y tuercas… cosas así».

− Y ahí va nuestra obligada doble pregunta para finalizar la entrevista: ¿cómo te has sentido este año defendiendo los colores de Moremoto Racing y en qué frentes te veremos luchando en 2020?

− «Gracias a Moremoto, entre otras cosas, he aprendido un poco a ocuparme de cosas que no tienen que ver con dar gas pero que para un piloto son hoy en día igual de importantes. En cuanto a mis planes deportivos, haré el Campeonato de España y también el Europeo, en este caso, con la intención de acudir a todas las carreras, aunque ello dependerá del acuerdo definitivo al que lleguemos con nuestro equipo. También está aún en el aire la posibilidad de disputar alguna prueba internacional de pretemporada, en concreto, de las que se celebran en Italia».