En el marco del Gran Premio de Bélgica de Motocross también hubo lugar este fin de semana para la disputa de una nueva carrera del Europeo de 125, donde el piloto de Moremoto Racing Oriol Oliver prosigue con la difícil tarea de hacerse notar dentro de un certamen que resulta especialmente reñido y en el que continúa siendo el mejor de los representantes españoles, además de ocupar el sexto lugar de la clasificación provisional.

Con una undécima plaza en la primera manga, una vigésimo primera en la segunda, y una décimo quinta en la general saldaba Oriol este difícil asalto a la arena de Lommel.

«Antes de este Gran Premio, pasé dos semanas entrenando en Bélgica, tratando de cogerle bien el “feeling” a la arena, dado que en España no tenemos apenas circuitos de este tipo. También habíamos rodado en la pista de Lommel, pero al comenzar los libres constaté que el trazado había variado mucho y tenía nuevos saltos, así que lo primero fue intentar acostumbrarse a esos cambios.

En la sesión cronometrada me hice con el séptimo mejor tiempo de mi grupo y ya en la primera manga de carrera salí bien, aunque un problema que padecí con las gafas me descentró un poco. Pasé toda la manga luchando en el límite del “top 10”, hasta que comencé a acusar el cansancio, en parte porque no estaba rodando con mi fluidez habitual, y finalmente bajé hasta el undécimo lugar.

En la segunda arranqué incluso algo mejor, cerca del “top 5”, y durante mucho tiempo peleé en torno a la séptima posición, pero a cuatro vueltas del final me salí en el triple, aterricé sobre arena muy blanda y la moto me golpeó, dejándome muy dolorido. Acabé como pude, sin la visera del casco y muy retrasado, pese a lo cual me siento satisfecho del ritmo que sostuve hasta ese momento».