Mala fortuna para Sandra Gómez en los Seis Días Internacionales de Enduro, celebrados la pasada semana en la localidad portuguesa de Portimao y a los que nuestra piloto acudía como miembro del equipo español femenino, compartiendo filas con Mireia Badia y Aída Castro.

La madrileña arrancó con prudencia durante las dos primeras jornadas de carrera, en las que se situaba décimo quinta, para el miércoles y jueves ser duodécima. Por desgracia, el motor de su Husqvarna rendía el alma el quinto día, privando a Sandra de toda posibilidad de acabar la prueba.

«En un principio todos esperábamos más de estos Seis Días, porque en el equipo nacional femenino íbamos a contar con Laia Sanz y luego no pudo ser. Salimos a ganar igualmente, dándolo todo cada día, aunque éramos conscientes de que teníamos menos posibilidades. Además, al llegar a Portugal, enseguida constatamos que las especiales eran muy de cross, sobre un terreno propicio a la aparición de roderas, y no tenían nada particularmente técnico en lo que yo pudiese aportar un plus al equipo.

Empezamos regular, aunque el primer día en los ISDE es siempre de toma de contacto, de procurar no caerte, de adaptarte al terreno. Luego fuimos avanzando e incluso llegamos en algún momento a figurar terceras, porque Australia se vino abajo y Alemania también falló. Los Seis Días son muy largos y a veces tienes que estar un poco a la expectativa, esperando justamente el fallo de formaciones supuestamente más rápidas. Y en cualquier caso, yo buscaba la forma de ir mejorando todo lo posible, fijándome mucho en los demás, aparte de que no sufrí demasiadas caídas y de que físicamente, aun siendo ya final de temporada, me encontré bien. Por desgracia, mi moto se rompió el quinto día.

Decir, eso sí, que el equipo español en su conjunto funcionó de maravilla y en todo momento, tanto mis compañeras Mireia Badia y Aída Castro como yo misma, nos sentimos muy arropadas. Mecánicos, mochileros, pilotos… todos estuvimos muy unidos e incluso el reconocimiento a pie de las especiales lo abordamos junto con los chicos de Trofeo y Trofeo Junior. El compañerismo que reinó entre nosotros creo que es lo que hizo grande a la delegación española, que recogió, además de nuestro quinto lugar en el Women´s Trophy, dos terceros puestos en Junior y Club».