El pasado fin de semana daba comienzo en la localidad italiana de Gazzane di Preseglie el Campeonato de Europa de MX85 y a esta primera cita acudían Unai Aguiló y Elías Escandell dispuestos a pelear en la escena internacional del motocross, aunque la suerte
no les iba a acompañar.

Unai perdía el control de su moto en un salto, a poco de iniciar su sesión de entrenamientos cronometrados, y en la consiguiente caída sufría una doble fractura en el húmero del brazo derecho. Los detalles nos los brinda su propio padre: «en Italia los médicos nos aconsejaron operar y poner una placa, pero preferimos regresar a casa y aquí nos han dicho que es mejor no hacerlo, porque la fractura se ha producido en la cabeza del hueso, que es zona de crecimiento, por lo cual resulta más conveniente inmovilizar, al menos, durante tres semanas, y esperar a que el hueso suelde por sí solo, controlando el proceso mediante radiografías periódicas. Lo que más le duele a Unai no es la lesión, sino las carreras que se va a perder con ella».

En cuanto a Elías, tras un prometedor quinto mejor registro en su grupo de entrenamientos tanto libres como cronometrados, no conseguía mostrar igual rendimiento en carrera, debiendo contentarse con un 14º y un 12º en las mangas: «la lluvias dejaron el circuito muy embarrado y resbaladizo, aunque, por otro lado, se fueron formando apoyos en los que resultaba divertido dar gas. Me sentí muy cómodo, rápido y seguro, realizando buenas salidas, pero debo evitar cometer esos pequeños errores que acaban en caída y te hacen perder posiciones. En cuanto a mi físico, decir que aguanté bien y en ese sentido estoy contento porque los efectos de mi nueva fase de preparación física son claros. Ahora seguimos de viaje por Europa, pues el próximo fin de semana toca Francia».